¿Lo sabía? La tecnología infrarroja proporciona soluciones seguras que a veces son pasadas por alto.
¡Garantice la visibilidad!
La puesta en marcha de un equipo móvil requiere de una gran atención por parte de los operarios.
¿Están las áreas de los trabajadores bien definidas? ¿La visibilidad es suficientemente buena? A través de un control remoto, un operario puede dirigir un puente grúa sin darse cuenta de ello o mover la que no se debe…
Existen 2 opciones para prevenir riesgos. En ambos casos, el mando de control remoto del operario está equipado con LEDs infrarrojos y el equipo móvil con uno o más células infrarrojas conectadas al receptor.
1 Puesta en marcha mediante validación infrarroja
¿Propósito? Garantizar que el operario está presente junto al equipo durante la puesta en marcha y que dispone de buena visibilidad. Para validar la puesta en marcha, los diodos del control remoto deben apuntar en la dirección de la célula infrarroja.
2 Limitación de área de acción mediante infrarrojo
¿Propósito? Definir un área de trabajo restringida alrededor del equipo móvil de forma que el operario pueda siempre controlar su área de control. Las células infrarrojas se utilizan para definir esta área. Si el operario se aleja, el equipo para su avance.
Equipo compartido
¿Varios de sus operarios utilizan el mismo mando de control remoto? ¿Quiere que un emisor trabaje con cualquier otro receptor sin que interfieran entre ellos? El infrarrojo lo hace posible.
La función “puesta en marcha asociada de emisor/receptor” permite al operario seleccionar el receptor a controlar. Con la puesta en marcha (encendido del emisor), se transmite un mensaje de código infrarrojo al receptor específico. Esta opción autoriza a varios emisores (con código id y diferentes canales) a tomar el control del receptor con éxito.